La economía circular es una gran oportunidad para las empresas industriales. Hasta el punto que incorporar la circularidad de forma estratégica debe ser necesaria, no sólo en su operativa, sino en toda la visión del negocio. Esta es la conclusión a la que han llegado los miembros de la Comisión Técnica de Innovación de amec en su último encuentro, que ha tenido lugar este mes de noviembre.

Ello es debido a que “el epicentro de las oportunidades de transformación deben situarse en la energía, el ámbito donde existe margen de actuación y mejoras disruptivamente innovadoras en el sector de bienes de equipo y tecnología”, tal y como destacó del experto en Estrategia de Economía Circular, Ignasi Cubiñà, que participó como invitado en la Comisión de Innovación. Para Cubiñà, la diferencia competitiva de Europa respecto a EE.UU. y Asia se encuentra en este ámbito. 

Las empresas abordaron cómo aplicar esta innovación, al mismo tiempo que evaluaron cómo el aumento de los precios de la energía está afectando a la actividad industrial en general. Asimismo, los miembros de la comisión, que preside Jordi Serrat, director de Producto y Tecnología de Azbil Telstar, trataron la crisis de materias primas y de la logística, la evolución de la movilidad y los temas candentes que están afectando a la operativa de la producción, que han conducido a las organizaciones a establecer una mayor colaboración con todas sus áreas funcionales y especialmente también sus departamentos financieros para ser más productivos y eficientes.