Estados Unidos ayudará a las empresas estadounidenses en la diversificación de sus cadenas de suministro fuera de China para reducir su dependencia económica y comercial respecto al país asiático.
El Senado de los Estados Unidos ha llegado a un acuerdo sobre un proyecto de ley para abordar cuestiones relacionadas con China, llamado ‘‘Strategic Competition Act of 2021’’, en el que se aborda la competencia económica con el país asiático.
En el texto del proyecto, se reconoce que China está cerca de su objetivo de convertirse en el líder mundial en ciencia y tecnología.
El impulso de China para convertirse en una "superpotencia tecnológica y de fabricación", promoviendo una "innovación con características chinas", presenta un desafío para la seguridad nacional de los Estados Unidos, haciendo necesario obligado a reexaminar y revisar su estrategia hacia China.
Fomento de la diversificación de las empresas
En el artículo 101, se enfoca en la autorización para ayudar a empresas estadounidenses en la diversificación de sus cadenas de suministro internacionales.
Para ello, se plantea establecer un programa para facilitar la contratación por parte de las embajadas de los Estados Unidos de los servicios profesionales de expertos calificados para ayudar a las personas y empresas estadounidenses interesadas que operan en China a:
Persecución de medidas anticompetitivas
Los artículos 402 y 403 se centran en la aplicación de una serie de medidas dirigidas a controlar las medidas aplicadas por China contrarias a la libre competencia o que atenten contra la propiedad intelectual de las empresas estadounidenses.
Desde esta perspectiva, las políticas seguidas por China en el ámbito político, diplomático, económico, militar, tecnológico e ideológico para convertirse en un competidor global estratégico son contrarias a los intereses y valores de Estados Unidos, sus socios y gran parte del resto del mundo.
China estaría utilizando políticas industriales en formas anticompetitivas para asegurar el dominio de las empresas chinas, como el robo de propiedad intelectual, transferencias forzadas de tecnología, subsidios regulatorios y financieros y acceso obligatorio a datos de propiedad como parte de acuerdos comerciales y comerciales entre empresas chinas y extranjeras.
Entre las medidas planteadas, se encuentra la publicación de una lista de todos los subsidios proporcionados por el gobierno chino a las empresas chinas y de una lista de las empresas estatales que han robado propiedad intelectual de empresas estadounidenses.
Susana Gonzalez Ruiz
Observatorio amec
sgonzalez@amec.es