Isabel Perea y Marta Alarcón,
socias de auditoría de Grant Thornton
En un año complicado, marcado por la Covid-19, todas las cifras en referencia al peso de la mujer directiva en las organizaciones a nivel internacional han mejorado, una tendencia que pone sobre la mesa la necesidad de que aquellas empresas que aspiren a ser más internacionales deban preocuparse, también, por implantar estructuras de mando equilibradas. Esta mejora de la presencia femenina en la alta dirección se reflejaen el Informe de Grant Thornton sobre la mujer directiva 2021, que alcanza su 17 edición y del que somos ambas embajadoras.
El entorno empresarial está experimentando cambios acelerados, muchos de ellos llamados a convertirse en permanentes, principalmente relacionados con entornos de trabajo más flexibles e híbridos que muchas organizaciones han adoptado en el último año. La pandemia del coronavirus ha impulsado un cambio fundamental en las prácticas laborales de todo el mundo, obligando a millones de personas a adoptar un modelo de trabajo a distancia y, por tanto, más digital, que ha eliminado algunos obstáculos tradicionales para las carreras de las mujeres.
Nuestra nueva investigación muestra un aumento en la proporción de mujeres directivas en todo el mundo. Con un 31% frente al 29% de 2020, superando así finalmente el punto de inflexión del 30%. De esta forma, concluimos que nueve de cada diez empresas de todo el mundo tienen ahora al menos una mujer en sus equipos de dirección. Ante este contexto, creemos que ahora se abre una ventana de oportunidades mediante la cual los líderes empresariales pueden escoger dos vías: acelerar el progreso de sus negocios hacia un futuro más inclusivo o elegir volver a un modelo anterior.
Los datos hablan por sí solos. Aunque la experiencia de muchas mujeres en sus entornos de trabajo durante el año 2020 ha sido difícil, soportando las consecuencias económicas y sociales de la pandemia, en 2021 veremos la mayor proporción de mujeres en la alta dirección a nivel mundial. Hemos obtenido datos nunca vistos en nuestra investigación y con la expectativa de que esta tendencia se acelere.
En lo que se refiere a España, en cambio, el efecto de la pandemia ha provocado un estancamiento en el avance de los planes de igualdad de género en la empresa, obligada a la implementación de medidas de urgencia centradas en la supervivencia operativa y dejando en un segundo plano los esfuerzos en materia de diversidad. Ahora, tenemos un importante reto que afrontar. Tras más de cinco años de tendencia alcista, durante el último ejercicio la presencia de mujeres en puestos directivos en nuestro país se ha mantenido estable y alcanza en la actualidad el 34%. Aun así, pese al ligero parón de este año, la cifra de mujeres directivas en la empresa española se equipara con la media europea (34%) y se sitúa tres puntos por encima de la media global (31%).
Cabe destacar que los beneficios de la diversidad a nivel directivo incluyen la mejora de los resultados financieros, el aprovechamiento del talento, el reflejo de las perspectivas del mercado y de los clientes, y el aumento de la innovación. Con estas premisas, creemos firmemente que una mayor paridad en la alta dirección ayudará a las empresas a navegar con éxito en estos tiempos de incertidumbre y en un entorno cada vez más globalizado. Es precisamente por este motivo que aquellas industrias que busquen abrir horizontes fuera de nuestro país deben tomar un compromiso en pro de la diversidad para no quedarse atrás. Nos referimos a un compromiso real y que supondrá cambios a largo plazo. Las decisiones que tomemos hoy es probable que no tengan un impacto notable hasta dentro de cinco años.
En un contexto cambiante, y más con el último año que hemos vivido,que ha impulsado una expectativa de mayor representación paritaria en los niveles de decisiones más altos, el éxito hacia una mayor diversidad einclusión requerirá que los líderes empresariales demuestren rasgos específicos. La adaptabilidad, la resiliencia, la capacidad de colaborar y, en particular, la empatía, serán atributos esenciales.