El último Monitor de Políticas de Inversión de la UNCTAD analiza las tendencias en las políticas de salida de inversión extranjera directa (SIED), señalando un aumento generalizado de las restricciones.
Históricamente, las restricciones a la SIED se observaban principalmente en los países en desarrollo y estaban relacionadas con riesgos de balanza de pagos.
En la última década, no obstante, se ha observado un cambio en el enfoque regulatorio de la SIED, con un aumento de las restricciones, tanto en los países en desarrollo como en los desarrollados.
El aumento de las medidas más restrictivas de SIED observado desde 2011 puede explicarse en parte por la creciente preocupación por las prácticas de lavado de dinero, la evasión fiscal y otros flujos financieros ilícitos disfrazados de IED.
La tendencia general hacia una mayor regulación se vio aún más acentuada por la pandemia de COVID-19. Además, en los últimos años han cobrado importancia las preocupaciones relacionadas con los posibles riesgos para la seguridad nacional y económica, en particular en relación con los conocimientos críticos y las tecnologías estratégicas emergentes.
Las consideraciones de sostenibilidad y los beneficios potenciales para el desarrollo del país receptor figuran cada vez más entre los criterios para calificar para el apoyo de políticas de SIED, particularmente entre los países desarrollados.
Principales Justificaciones de las políticas de SIED (fuente UNCTAD):
A medida que las restricciones a la SIED se generalizan, la complejidad de las normas aplicables está aumentando la carga administrativa.
Más información:
UNCTAD . Investment Policy Monitor No.27: Outward FDI policies: promotion and facilitation – regulation and screening
https://unctad.org/system/files/official-document/diaepcbinf2024d1_en.pdf