La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EE. UU. ha implementado una nueva Orden Ejecutiva que revoca las sanciones de EE. UU. contra Siria, con efecto a partir del 1 de julio de 2025.
La OFAC ha eliminado a 518 personas y entidades de la Lista de Nacionales Especialmente Designados y Personas Bloqueadas (SDN List) que estaban sancionadas bajo el programa de sanciones a Siria.
El levantamiento de estas sanciones se produce después de lo que la administración denomina «acciones positivas tomadas por el nuevo gobierno sirio bajo el presidente Ahmed al-Sharaa».
Este levantamiento también sigue a la emisión de la Licencia General (GL) 25 para Siria, que autoriza ciertas transacciones previamente prohibidas, incluyendo nuevas inversiones en Siria y la prestación de servicios a personas y empresas en Siria.
A pesar del levantamiento general, se mantienen sanciones contra Bashar Al-Assad, su régimen, sus asociados y otros «actores regionales desestabilizadores».
Estas sanciones contra el antiguo régimen de Al-Assad y las partes asociadas se mantendrán bajo un nuevo programa llamado «Promoción de la Rendición de Cuentas para Assad y Sanciones de Estabilización Regional».
Siria sigue estando sujeta a estrictas restricciones de control de exportaciones de EE. UU.
Bajo las reglas actuales, prácticamente todas las exportaciones o reexportaciones a Siria de artículos regulados por las Regulaciones de Administración de Exportaciones (EAR) están prohibidas sin una licencia de la Oficina de Industria y Seguridad (BIS) o una excepción de licencia aplicable. Esto incluye bienes y tecnología de origen estadounidense, y artículos de fabricación extranjera que contengan más del 10% de contenido controlado de EE. UU.
Es crucial entender que el levantamiento de las sanciones bajo la OFAC no significa automáticamente que una transacción esté libre de otros requisitos de licencia. Agencias como el Departamento de Comercio o el Departamento de Estado aún pueden requerir autorización, dependiendo de la naturaleza de los bienes o servicios involucrados.
Aunque las sanciones económicas generales están siendo levantadas, persisten restricciones significativas relacionadas con el antiguo régimen y el control de exportaciones, lo que requiere una diligencia debida continua para las empresas que operan o planean operar en la región.